El 14 de diciembre
de 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas, en su resolución 45/106,
designó el 1° de octubre como Día Internacional de las Personas Mayores. Un año
más el Partido Socialista se suma a esta celebración, reiterando su compromiso con
las personas mayores. En nuestro país, el 18% de la población cuenta con 65
años o más, de las que el 56% de las personas mayores son mujeres. En este día
queremos renovar nuestro compromiso con las políticas de envejecimiento activo
que fomenten la participación de las personas mayores en la política y en la
actividad social.
Las dos grandes
medidas por excelencia de protección a los mayores las han impulsado Gobiernos
del PSOE. Estas medidas son la universalización de las pensiones y la Ley de
Dependencia. Las personas mayores han pasado de ser las más atendidas por los
gobiernos socialistas a ser las peor tratadas, ahora, por el gobierno del PP,
siendo uno de los colectivos más castigados por las medidas puestas en marcha
por el gobierno de Rajoy. Las medidas adoptadas por el gobierno del PP en
materia de pensiones, los recortes en Dependencia, el establecimiento del
copago de medicamentos o la eliminación de los presupuestos para teleasistencia
constituyen un durísimo e injustificado castigo de este Gobierno a las personas
mayores.
Ahora, el Gobierno
pone en marcha una reforma de las pensiones con la que pretende consolidar que
éstas sigan sin subir con arreglo a lo que suban los precios. Es más, las
pensiones se devaluarán respecto de lo que suben los precios en la medida en
que lo único que se garantiza es una subida del 0,25% de las prestaciones. Esto
significa que en 10 años se perderá prácticamente un 20% de poder adquisitivo
en la cuantía de las pensiones. Y todo ello, en un momento en el que se ha
producido un fuerte y considerable aumento de personas mayores que ayudan económicamente
a sus hijos. En 2012, este porcentaje era del 40,4% concretamente, lo que
supone 4 de cada 10 mayores. A todo ello se suma que los pensionistas pagan por
primera vez por sus medicamentos.
Los recortes
sucesivos en los Presupuestos Generales del Estado aprobados por el Gobierno
del PP en 2012 y 2013 han reducido la aportación del Estado al Sistema de la
Dependencia en más de un 30%, poniendo en riesgo su sostenibilidad. Desde que
se aprobó el Decreto Ley que reforma la Ley de Dependencia, se ha expulsado del
Sistema de Autonomía y Ayuda a la Dependencia (SAAD) a 42.592 personas mayores
de 65 años, es decir, se les ha retirado la ayuda al 7,3% de los beneficiarios.
Antes estas
políticas regresivas, el Partido Socialista manifiesta su firme compromiso de
suprimir el copago farmacéutico y nuestra frontal oposición a la rebaja de las
pensiones y la consecuente pérdida de poder adquisitivo que sufren y sufrirán
aún más las personas mayores en España, y apelamos a que cualquier cambio en
esta materia se desarrolle, por consenso, en el marco del Pacto de Toledo