El Partido
Socialista conmemora un año más el día Internacional de las Mujeres en un
contexto de retrocesos históricos en materia de derechos y libertades en
nuestro país. En este día, que siempre
ha sido un momento de demandas y reivindicaciones para los derechos de las
mujeres en todo el mundo, alzamos nuestra voz para denunciar el grave retroceso
que supone para los derechos de las mujeres y para la libertad de toda la
ciudadanía el anteproyecto de contrarreforma de la ley del aborto
presentado el pasado mes de diciembre por el
Gobierno del PP.
Un proyecto que
pretende la derogación de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva y de
Interrupción Voluntaria del Embarazo aprobada por el Gobierno socialista en el
año 2010. Una ley de Salud Sexual que aborda de manera integral el derecho a la
salud sexual y reproductiva, y cuyo objetivo es la reducción del número de
embarazos no deseados y por tanto la reducción del número de interrupciones
voluntarias del embarazo, a través de la información, la educación y la
prevención, en definitiva una ley equilibrada, que garantiza los derechos de
autonomía y la libertad de las mujeres. Todo lo contrario de lo que pretende el
anteproyecto de ley del PP, porque con esta contrarreforma eliminan la
prevención de los embarazos no deseados, el derecho a tener información y
educación sexual en las escuelas y derogan los esfuerzos por establecer
estrategias en salud sexual y reproductiva para toda la ciudadanía.
Por todo ello,
pedimos al Gobierno que renuncie a convertir el anteproyecto de ley del aborto
en un proyecto de ley, solicitando que el Gobierno no dé ni un paso más en la
tramitación de un texto que supone un enorme retroceso para la sociedad
española. Pedimos la retirada inmediata
de un texto que muchísimas mujeres y también muchos hombres, tanto en España
como en Europa, sienten como una auténtica agresión a la libertad y a la
dignidad de las mujeres, a la dignidad de una ciudadanía que hace años ya ganó
la batalla de poder elegir.
Existe un
sentimiento internacional de que en España se está produciendo no solo un grave
retroceso en derechos sociales, sino también un grave retroceso en libertades y
derechos civiles, y es ese sentimiento el que se moviliza tanto en nuestras
calles como en muchas ciudades y capitales europeas, porque la propuesta del
Gobierno es una propuesta que no encaja en Europa, es una legislación que
cercena la libertad de las mujeres, que nos expulsa del ámbito de la Unión
Europea, y nos sitúa a la cola de países democráticos en el reconocimiento de
los derechos de las mujeres.
Denunciamos un
proyecto legislativo que no sólo aumentará el número de abortos clandestinos
sino que aumentará la mortalidad y la pérdida de salud y vida de las mujeres en
nuestro país. Un proyecto que aumentará la desigualdad y que volverá a dividir
a las mujeres españolas entre quienes se pueden permitir viajar a un país
vecino y acceder a un aborto seguro y las que no puedan y se vean obligadas a
interrumpir su embarazo en condiciones ilegales y clandestinas, en nuestro
país.
En definitiva un
anteproyecto de ley innecesario e inoportuno que no responde a ninguna demanda
social sino a los intentos del gobierno del PP por contentar a sectores
minoritarios y ultraconservadores que tratan de imponer sus dogmas a toda la
sociedad, y que no pueden aceptar las cotas de libertad, igualdad y presencia
social que han alcanzado las mujeres en nuestro país, gracias en gran medida a las políticas de los
gobiernos socialistas, que han hecho de la libertad un patrimonio colectivo que
debemos defender ahora más que nunca.
También, un año
más, debemos llamar la atención sobre la grave situación que vive la lucha
contra la violencia de género, porque un año más el Gobierno popular ha
reducido los presupuestos para combatirla y sigue dejándola fuera de sus
prioridades. Denunciamos que la reducción del presupuesto ya supera el 28% y
que las reformas legislativas como la del Código Penal o la Reforma Local,
vaciarán de contenido a la Ley Integral y dejará desprotegidas a las víctimas.
En definitiva, estamos asistiendo al desmantelamiento por la puerta de atrás de
la Ley Integral contra la Violencia de Género.
La reforma
laboral, la crisis y las políticas del PP están
mandando a las mujeres de vuelta a casa, como lo demuestra el dato de que por
primera vez en más de 30 años la Tasa de Actividad femenina, que siempre había
crecido, está descendiendo. Estamos igual que el 8 de marzo pasado, peor si
cabe, porque las mujeres deberían trabajar 82 días más al año que los hombres
para poder cobrar la misma retribución anual, porque en España hay 2’8 millones
de paradas, tienen la mayoría de contratos temporales y realizan el 80% del
trabajo no remunerado. Esto no es casual, la derecha necesita que las
mujeres asuman los servicios que el Estado está dejando de prestar con su
política de recortes en la educación, en sanidad y en dependencia, por eso
mandan a las mujeres de vuelta al hogar.
En las próximas
elecciones europeas nos jugamos mucho, y especialmente las mujeres que son
quienes más sufren con mayor vulnerabilidad
las situaciones de desprotección y los retrocesos sociales tanto en
España como en Europa. Nos jugamos la Europa del bienestar, de los derechos
económicos y sociales, nos jugamos la Europa de las libertades y de la
convivencia, nos jugamos la Europa que se reconoce diversa y garantiza la
libertad y los derechos de todas las personas, de las mayorías y las minorías,
de mujeres y hombres.
Este 8 de marzo el
PSOE acompañará a la sociedad y a las organizaciones sociales y feministas en
las movilizaciones en defensa de los derechos y la libertad de las mujeres que
se celebrarán en toda España. Además, hacemos un llamamiento a los hombres y
mujeres de este país, a las instituciones y a las organizaciones para qué se
sumen a esta conmemoración del Día internacional de las mujeres.